miércoles, 23 de febrero de 2005
Tristeza y contra la tristeza: de Zolo a Caballito Frenado
Arena
En el borde derecho de este blog pongo una imagen que voy cambiando con una frecuencia más lenta que los post. ahí quiero ir recogiendo tendencias, objetos, creadores, personajes, que influyen en Espinita (y en mí). No es una idea original, la he tomado de lo que en Microsiervos llamaban la imagen del día. Yo he preferido un formato alargado porque a veces me gusta relacionar dos imágenes. Por ahora no tenían nombre, y llamaba a esto cuadradito pero a partir de ahora se llama arena: arena como la que trae el viento desde África y al final permite que sobre las lavas haya vida.
Esta semana quería cambiar la imagen y dedicarla a Zolo, un juguete de construcción, por llamarlo de alguna manera. Buscando imágenes, quizá de nuevas piezas (pensaba yo) visité la web de Zolo.
La tristeza: adiós a Zolo
Así me enteré de que Zolo 3, el mejor conjunto de piezas, ya no existe. es lo mismo que decir que Zolo ya no existe porque lo que queda son conjuntos para niños, de piezas de plástico buenas pero poca cosa comparadas con Zolo 3. Descubrí Zolo a finales de los años 90 por V., que a su vez lo había visto en una tienda en Madrid, hacia finales de los 80. Quizá fue 1998 cuando busqué en Internet, con el buscador por defecto de aquel entonces: Altavista. Llegué a la web de Zolo con mi módem de 28 y compré un Zolo Helio, de plástico y para niños, y un Zolo 3 (a unos precios terroríficos). Cuando llegó, el precio era lo de menos: una caja de cartón ondulado marrón totalmente espartana un bote cilíndrico metálico pintado por fuera con las siluetas y los nombres de las piezas, Scepter, Lilypad etc. y dentro unos tesoros en forma de piezas de madera extravagantes y delicadísimas, terminadas y pintadas a mano, con muchísimo cariño; por fuera, en la lata, figuraba impreso supongo que con orgullo el nombre del fabricante, Prasidha Adhikriya, de Bandung, Indonesia. Coger las piezas de Zolo 3, todas curvas, crea una atmósfera en sí. Zolo 3 condensa en esas formas de madera mucho del espíritu de los años 80, de la arquitectura posmoderna, algo de la estética de Alessi, algo de Saltimbanco de Cirque du Soleil, y más cosas.
Pero en la web de Zolo ya no existe Zolo 3, ni en ninguna otra parte. El último rastro de Prasidha Adhikriya es de 2002, tuvo una web, pero que ya no funciona Pensándolo bien no es sostenible algo hecho con tanto interés.
Contra la tristeza: Caballito Frenado
Caballito frenado seguramente es el personaje más Zolo de todos.
Podría perfectamente estar construido con piezas ensambladas. Sacando las piezas y eligiendo algunas para pasar por el escáner sin pensarlo mucho apareció la silueta de C.F.
Así que hablaré un poco de él: deriva de un personaje anterior, un perrito que se llamaba Kek, y aunque su forma no es fija del todo (y así debe ser) más o menos es como un cuadrúpedo con un carácter solitario e introvertido, especialmente cuando enrosca la cola hacia atrás.
El nombre viene de algo que escuché a una chica venezolana: caballito frenado es un nombre popular de una marca de ron muy conocida, Pampero, que en la etiqueta tiene una silueta blanca de un jinete que frena a un caballo encabritado. A partir de esta expresión, incluso una vez grabé una pieza de música (hace muchos años): Caballito Frenado contra la tristeza. Esa frase se ha quedado para siempre en mi mente.
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1 comentario:
Noel dice:
Vaya, una canción sobre el ron Pampero. ¡Yo quiero oírla!
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